BIANCA
$56.000,00Precio
Los cachorros se acurrucaban contra el cálido costado
de la madre mientras ella los iba lamiendo con su lengua
seca uno por uno, y así pasaba largo rato antes de
dormirse: se quedaba escuchando su acompasada
respiración, la divergencia de sus diminutos e inquietos
corazones, su quedo e inocente resoplido.
En esos instantes —y estos no eran pocos en la vida
de la vieja laika— todo su cuerpo se colmaba de una
inmensa y apacible calma, de una enorme felicidad maternal.
¿Quizás esta vez no sería tan breve?